domingo, 20 de agosto de 2023

Alguien más y no "ella".

 Soy fanática del "amor eterno". 

Creo firmemente que a mí escribió Jane Austen, otra opción es que en mi otra vida nací en la época en dónde dos personas se amaban tanto que preferían morir tomados de la mano recostados en su cama que morir solos en plena soledad. Creo que es eso, una época equivocada.

Soy fanática de una fantasía. 

Fanática de querer pertenecer a alguien y viceversa, que alguien me pertenezca, no en el sentido de posesión, asfixiante y desoladora, en el sentido de compartir ese anillo que va en el dedo anular, que nos brillen los ojos al mirarnos, y que siempre se nos alborote el corazón cuando nos fundimos en un abrazo. 

Ya sabes, una fantasía, el vestido blanco, que él "mi mujer", los domingos de truco y asado, las navidades repletas de familiares. 

Una fantasía. Que me ame tanto que siempre quiera solucionar los problemas, que nunca se rindan por mí, que no resistan la distancia.

Él es mi "él". Perdón, lo fue. 

Soñé siempre que de su garganta saliera ese tibio ronroneo cuando diga ese pronombre, con esos domingos, el vestido, el traje, las navidades, reyes, todo…pero yo no soy su "ella".

Llegué tarde. O depende de quien lo mire, quizá llegue temprano. 

No es que no me ame, es que simplemente yo no soy su "ella".U

na fantasía. 

De amor eterno, con alguien que ya tiene dueña.

sábado, 23 de mayo de 2020

Un mar aburrido.

Me duelen los brazos, los remos los solté hace semanas, ya no me importa si me ahogo o si tengo que nadar hasta la costa pero cualquier cosa es mejor que seguir navegando por vos. Para mi extrañar es como estar en un barco en el medio del mar pero sin que existan olas violentas, tiburones hambrientos o lluvia torrencial, solo floto al ritmo del buque, esperándote a vos o alguna señal que me indique que me puedo tirar para buscarte pero no llega, extrañar me hace sentir como si el mar en el que me encuentro lo cree yo misma con mis propias lagrimas, que no son de tristeza, son de capricho porque no me gusta extrañar, no puedo con el frenesí de sentir que te puedo tener y dos segundos después ya no, yo no siento a escondidas, yo te lo quiero gritar, en la cara y que me mires a los ojos directo cuando te diga que por vos me tiro a bucear sin respirador, que por vos me lanzo del botesito a buscarte pero no me dejes acá, sola, en la incertidumbre de un mar aburrido, porque peor que ahogarme es esperarte para siempre.
Maite Fedeli.








viernes, 20 de diciembre de 2019

Fui yo también

no me voy a meter
voy a hacer lo que me pediste
por más que me gaste todas las lágrimas
te voy a respetar
y te voy a dejar ir. 
te lo prometí internamente 
cuando me miraste y me pediste
que te deje en paz para siempre
así que no voy a ser egoísta 
voy a cargar con mi dolor y mi karma
y me voy a ir bien lejos de tu camino 
porque tengo que hacer (te) el bien
porque no quiero ser más el cuchillo
no planeo que leas esto 
porque peor me haría saber 
que lo leíste y no dijiste nada 
lo hago para soltarlo
de una vez 
porque fui yo también 
solo que no quise darme cuenta 
lo hago para perdonar(nos)
por todo
para felicitar(nos)
por intentarlo 
más veces de las que puedo recordar 
aún que no diera resultados a largo plazo
y para agradecer(nos)
por el amor, por el hombro y los abrazos 
por haber ocupado un lugar en mí 
para toda la vida 
perdón por la cobardía
pero él tendrá su forma 
y yo la mía.
así que con la llave en la mano
 a centímetros de la puerta
la cierro 
y me despido de él
a quién voy a querer eternamente. 

domingo, 5 de mayo de 2019

Hoy es para siempre.

Siempre escribo cuando los sentimientos son tan fuertes que no puedo tenerlos en mi, y vos fuiste la aficiono más grande de toda mi vida ,sin embargo, nunca se te escapo la oportunidad de apagar aquel fuego, incluso cuando no lo había siempre creíste que tenias derecho a debilitar cada parte de mi. Lo peor no es que lo hayas hecho, lo peor fue creer todas esas veces que yo podía cambiarte, como si fuera tu rehabilitación pero me di cuenta tarde que nadie puede curar alguien que esta tan jodido por dentro que jode a los demás, nadie tiene tu cura, ni siquiera yo que no me alcanzan ni los dedos de los pies para contar las veces que que intente arreglar(te) algo que no tiene remedio alguno, hacer cosas que nadie jamas va a ser por vos porque nadie va a querer tanto tu oscuridad como yo lo hice.
Pero hoy ya no tengo mas dedos para contar las chances, hoy me fallaste incluso cuando no tenia esperanzas de un "nosotros", hasta acá llego mi amor. Hoy me despido para siempre, hoy me perdono por todas las veces que me falle por serte fiel a vos, hoy espero sentada un amor que me quiera de verdad, algo sincero y puro, algo mejor que todo lo que me diste, y que quizás esto ultimo suene mal pero hasta el mundo sabe cuanto es lo que merezco, y vos eso no lo podes dar, ni la persona que mas te ame en este mundo va a saber como hacer para lidiar con todas tus sombras y demonios, y espero que nadie mas crea que eso es lo que se merece porque todos nos merecemos mas que la simple excusa de "así soy yo". Hasta nunca, querido amor, que sepas encontrar la felicidad entre todas tus miserias.

viernes, 8 de marzo de 2019

Al cero

Siempre juro que va a ser la última vez que te escribo pero después voy al supermercado y de fondo se escucha la canción que me cantaste al oído una de nuestras miles de noches, así vuelvo a casa, con el corazón debajo de la manga y en una servilleta (porque no alcanzo a agarrar un papel, los sentimientos corren rápido) escribo con letra de doctor, todo lo que se me cruza, intentando no romper el papel de la fuerza que hago para escribir y que las lágrimas no me corran la tinta.
Siempre juro que va a ser la última vez que te escribo pero después sueño con que tocas bocina en la puerta de casa para ir a la plazita a tomar una birra, y me despierto sintiendo tu lado del colchón vacío  más que congelado.
Siempre juro que va a ser la última vez que te escribo pero mientras tomo mates con mamá, ella me pregunta: “lo extrañas?” y con una risa fingida le contesto que no pero ella dice: “a mamá no, decime la verdad”, y la miró a los ojos sintiendo las lágrimas acumularse, asintiendo con la cabeza lo admito, no solo a mamá, sino al mundo, le dejo saber al universo que estoy otra vez en el lugar que creí haber dejado, ese en el que soy la única que extraña y le importa, volví a ponerme en el papel de siempre, aquel en el que me desvalorizo aún sabiendo que deje toda mi alma a tus pies (y poco te importo).
Siempre juro que va a ser la última vez que te escribo pero después dejo que tus fantasmas me lleven al mismo punto de siempre, al cero.


domingo, 24 de febrero de 2019

¿Lo armamos?


Armemos un fuerte, con las sabanas floreadas que tu vieja compro en un catálogo, que las paredes sean todas las sillas del comedor y que no haya lugar para el terror que nos da querernos, hagamos las preguntas más tontas y simples del mundo para reírnos un ratito, contame tus peores luchas y quizás, solo quizás, yo te cuente las mías pero no dejemos que por nada del mundo los fantasmas del pasado nos soplen las paredes como la casas del segundo chanchito, si queres jugamos a las cincuentas sombras de Grey pero no cedamos a que el miedo nos aleje aún más, rompamos el prejuicio de los millenials, aquellos a los que tanto miedo les da demostrar por no ser “intensos”. Que esta utopía este siempre de pie para cuando el mundo real sea tan malo como lo es siempre, con tus galletitas favoritas y una coca, la peli que más te guste y todo el amor que tengas para darme, nunca deje de tener ganas de volver a querer con lo lindo que es sentir el olor al café recién hecho en tus manos, ni hablar cuando esa cama se desarma por las noches o con esas siestas de invierno, detalles simples con los que compartir amor. Ármame una utopía más en donde me quieras de verdad, sanamente, sin atisbos de lastimarme porque no sé si mi corazón aguantaría una curita más porque las curitas solo tapan y un dolor tapado jamás deja de gotear, no hagamos despelote porque después no lo vamos a poder arreglar, hagamos las cosas bien diciendo las cosas de una, no me mantengas en tu vida si ya no tengo lugar en este fuerte, irme es más llevadero que verte entrar y salir porque no sabes lo que queres, entonces…¿Lo armamos o seguimos esperando?


Maite Fedeli.

lunes, 21 de enero de 2019

Explorador

Sabemos cuánto nos queda por descubrir del mundo en el momento en el que encontramos un universo nuevo en el cuerpo de otro, luego de que el fuego carcomió mucho tiempo las venas y la espera hizo de lo suyo con el calor, el beso que alejó toda furia parece ser la primera gota de una larga sequía y ahí descubrimos que a veces no es tan malo esperar por algo bueno.
Sólo los astros saben cuánto desee tus brazos, aquellos que me abrazaron con una facilidad mágica como si todo hubiera estado previamente ensayado incluso hasta las sábanas de tu somier, y si más bien las manos no nos alcanzaban para tocarnos fueron las risas cómplices de lo prohibido lo que más nos invadió a ambos, que seguramente aquello estaba mal y que eso iba a retornar un círculo vicioso donde dejar de probarte podría ser tortura, que habría que ocultarlo como si fuera el secreto más confidencial del Vaticano, aquel que dice que Dios no existe aunque se pueda sentir en una cama desordenada. Los besos lentos son más que simples bocas tocándose, tienen historia en cada movimiento, y más cuando no son desconocidas.

Está mal, dejar tu cama a las cinco de la mañana como si nada está mal, dejar que te quedes debajo de la luz roja de mis paredes está mal, pero aquello es tan prohibido que encandila y si tenemos que pisar infiernos por un ratito de ardor estamos dispuestos, y si tenemos que besarnos hasta cansarnos lo haremos pero nunca dejaremos de descubrir universos nuevos aunque tengamos estadía completa y de por vida en el de nosotros, porque si la vida no se hizo para ser explorador…¿Para qué se hizo?

Alguien más y no "ella".

 Soy fanática del "amor eterno".  Creo firmemente que a mí escribió Jane Austen, otra opción es que en mi otra vida nací en la épo...